La obra expuesta por Miguel Ángel Ygoa muestra distintos espacios urbanos, principalmente de Madrid, realizados con una amplia mezcla de técnicas gráficas, juntando en un mismo papel la acuarela, las tintas, el rotulador, el dibujo con grafito e incluso el collage en algunos casos. Si bien es verdad que hay vistas callejeras, las obras más grandes a las que se han dedicado hasta varios días de realización son de paisajes desde distintas azoteas de la ciudad, retratando la diversidad arquitectónica y urbana de Madrid desde la monumental y legendaria Gran Vía a las bajas y estrechas calles de Malasaña hasta los gigantes de la Castellana. Aunque muy diferentes y para nada parecidos técnicamente cabe mencionar algunos referentes como Antonio López o el estadounidense Jeremy Mann. Todo se junta en estas piezas, donde se busca simplemente abrir una ventana a una manera personal de ver nuestras ciudades, no a través de una pantalla, una cámara o una red social sino a través de algo mucho más antiguo y que sigue siendo muy importante a la hora de mostrar los lugares donde vivimos que es la mano que dibuja.
Miguel Ángel Ygoa es estudiante de arquitectura en la Universidad Politécnica de Madrid, y entiende el ejercicio de arquitecto de hoy en día como un cruce de disciplinas que van más allá de diseñar y construir edificios: no hay mucha diferencia entre proyectar una vivienda y pintar un cuadro o componer una pieza de música. Todo se trata de construir y producir material. Es aplicar el mismo proceso de trabajo a través de los diversos campos creativos, haciendo que el diseño de una silla sea igual que al de un rascacielos. El artista compagina sus estudios de arquitecto con la música, y también colabora en la elaboración de escenografías para teatro y la auto-producción y fabricación de muebles. Es este salto de una actividad a otra la que nutre su creatividad y capacidad de hacer cosas.
Del 6 de noviembre al 2 de diciembre. De miércoles a domingo, ininterrumpidamente. Entrada libre